A dos años de la SUBE en la ciudad: "Hay una rentabilidad muy magra"
El de 17 de octubre de 2016 fue la fecha límite que había fijado el Municipio para establecer como única alternativa de pago el sistema SUBE en los colectivos marplatenses. A dos años de su implementación, sin visibilizar mayores cambios, los kiosqueros persisten con sus reclamos por la baja rentabilidad que perciben ante cada operatoria.
En el balance que trazó al cumplirse dos años de la puesta en marcha de la nueva dinámica de abono en le transporte público, Martín Mallarini reconoció que se logró sostener una operatoria "normal" y "sin mayores inconvenientes" pero cuestionó su impacto económico para el rubro.
"Desde el principio pedimos que se tenga en cuenta una posible suba en la utilidad que nos retribuye el sistema. Es del 1 por ciento y endentemos que es muy baja por como se incrementaron los costos y las subas de los insumos y todo lo que eso trae aparejado", señaló.
En declaraciones a El Marplatense, el referente del sector se "lamentó" por la falta de respuestas y recordó que cada kiosco debe hacerse responsable del pago por el servicio de internet que requiere el sistema, así como el costo de los insumos de la ticketera. "Esto tampoco es menor por la cantidad de operaciones que se hacen a diario", remarcó.
"Siempre elevamos al reclamo a SUBE Nación para que se pueda mejorar la rentabilidad en el sistema porque verdaderamente es muy magra. Y no se puede sostener un servicio de esta manera", apuntó.
En junio del año pasado, el reclamo se extendió en distintos puntos del país y hasta llegó a motivar un paro en distintas jornadas, que no aportaron mayores respuestas por parte de las autoridades nacionales que están a cargo de la coordinación del sistema.