El 25 de octubre de 2017, el submarino partió desde la Base Naval de Mar del Plata con rumbo hacia la Isla de los Estados, cerca de Tierra del Fuego, para realizar un ejercicio militar. El 15 de noviembre de 2017, cuando regresaba hacia la ciudad balnearia, algo falló. Desde entonces y hasta el sábado 17 de noviembre de 2018 no hubo noticias sobre la ubicación exacta de la embarcación, que finalmente fue hallada a más de 900 metros de profundidades del mar.
ARA San Juan: "La Armada nos obligó a irnos de Mar del Plata"
El retorno de los familiares de los submarinistas del ARA San Juan a sus provincias que comenzará este domingo lejos está de producirse en un marco de conformidad y "consenso", tal como lo habían planteado desde la Armada Argentina.
Yolanda Mendiola, la madre del cabo Leandro Cisneros, sostuvo que la partida de Mar del Plata fue "obligada" y aseguró que "no gustó nada" el accionar que tuvieron las autoridades de la fuerza en las últimas semanas, después del hallazgo del navío a más de 900 metros de las profundidades del mar.
"Nos dolió mucho. Nos habían dicho que la Base Naval era nuestra casa hasta que lo necesitemos pero esto de lo pasajes lo decidió la Armada porque hubo cambios con la obra social", indicó la mamá de uno de los 44 tripulantes, en diálogo con El Marplatense.
Mendiola dijo que la justificación de las autoridades se basó en que la obra social Iosfa ahora se fusionó con las tres fuerzas armadas, por lo que "la contención de los familiares en el hotel Tierra del Fuego dejó de depender directamente de la Armada".
"Nos tenemos que retirar porque siempre nos ofrecieron pasajes de ida", criticó, y añadió: "Hay algunos familiares que ya querían regresar porque tienen otros problemas y tampoco es grato estar un año dejar abandonado nuestros hogares. Pero nosotros habíamos pedido más días".
Hace una semana, el jefe de la Base Naval local, capitán Gabriel Attis, le había garantizado a este medio que la partida había sido consensuada con cada una de las familias del interior que aún persisten en la ciudad. “El 16 van a empezar a retornar a sus domicilios y van a poder tener la contención familiar que es tan necesaria”, confirmó.
La mamá del submarinista insistió en que las familias todavía "no han cerrado este ciclo". "El Gobierno todavía tiene larga lucha con los familiares. Si bien regresamos a nuestras provincias, yo seguiré la lucha desde mi lugar", afirmó, y confesó: "Me voy vacía, no pude hacer ningún duelo y todavía no pude ver nada de mi hijo".
Antes de su ida, los familiares participarán este sábado a las 15 de un acto en el museo que tiene la Base Naval sobre el submarino, donde se realizará una "bendición" del lugar, a cargo del párroco David. Se emplazarán dos cuadros y también se colocarán vírgenes que fueron donadas en los últimos meses.