Ley Micaela: "Es fundamental para el cambio del que tanto se habla"
La fiscal Ana María Caro es una de las replicadoras de la Oficina de la Mujer de la Corte Suprema en la ciudad y trabaja para sensibilizar e incorporar la visión de género en la administración de Justicia. En diálogo con El Marplatense, aseguró que "la "Ley Micaela" es una herramienta fundamental para instrumentar este cambio del que tanto se habla con respecto al reconocimiento de la problemática de violencia de género, que es realmente grave".
"El Estado ha tenido relegado este tema durante mucho tiempo y esta herramienta es fundamental por la obligatoriedad que tendrán los funcionarios de los tres poderes de formarse en esta temática", indicó respecto a la creación del “Programa Nacional Permanente de Capacitación Institucional en Género y Violencia contra las Mujeres” que prevé el proyecto que fue aprobado este miércoles por unanimidad en el Senado de la Nación.
Aunque la aplicación de la norma comenzaría a regir recién a mediados del año próximo y solo a nivel nacional, Caro sostuvo que, "seguramente, por los proyectos que ya hay presentados, habrá una adhesión también en la provincia para que sea obligatorio en los tres poderes" bonaerenses.
Respecto a su experiencia, la fiscal indicó que, en el Poder Judicial, "se viene trabajando desde hace unos años en esta temática, replicando el protocolo de la Organización de Naciones Unidas, que a su vez se ha bajado a la Corte Suprema".
"A través de los Colegios de Magistrados de todo el país se han capacitado a replicadores para concientizar a los funcionarios judiciales sobre la problemática de violencia de género, sobre todo, hacinedo hincapié en el acompañamiento a la víctima y en no volver a revictimizarla", explicó y agregó: "Son pasos que hay que ir dando de a poco, nada va a cambiar de un día para el otro".
La fiscal también integra un grupo de voluntarios llamado "Acción Mar del Plata", en el que abogados y funcionarios judiciales trabajan en la concientización. "La violencia de género es una relación desigual de poder y hay que desarmar esta ideología machista de muchos años en varios ámbitos", manifestó.
"Lo que hacemos nosotros en el Poder Judicial es incentivar la toma de conciencia, es decir, la reflexión sobre las conductas que tenemos diariamente en el desarrollo de nuestra función. Se hace hincapié en poner en práctica esta nueva conciencia del lugar de la mujer y de lo mal que está el maltrato hacia la mujer, porque es algo que años atrás estaba naturalizado", ahondó.
La tarea de la fiscal y su equipo es darle herramientas a cada empleado y funcionario judicial para que puedan reconocer a las personas que sufren la violencia de género y, a partir de ahí, puedan comprenderlas y acompañarlas, "desde la mesa de entrada hasta la resolución de medidas".
Sin embargo, la fiscal afirmó que, al no ser obligatorias las capacitaciones en perspectiva de género que ella dicta desde su función como replicadora, la concurrencia es baja. "Por eso la importancia de la obligatoriedad en el programa que impulsa esta "Ley Micaela", que es una herramienta fundamental para cambiar las prácticas", concluyó.