Aplicarían multas de hasta un millón de pesos para quienes organicen "fiestas clandestinas" en Mar del Plata
Por Carlos Walker
Durante el pasado sábado en horas de la noche, vecinos denunciaron por WhatsApp al municipio una "fiesta clandestina" en una casa de Arenales y Peña, donde había más de 60 personas que quedaron a disposición de la Justicia. Se trató de un encuentro con música electrónica realizado sin controles ni habilitación.
Actualmente las fiestas electrónicas no están permitidas por el decreto que impone el ASPO en todo el país. En Mar del Plata, además, ni siquiera están habilitadas las reuniones de hasta 10 personas en espacios abiertos, como sí sucede en otros puntos del país.
Referentes de la nocturnidad ya han manifestado su preocupación por la realización de "fiestas clandestinas" durante la temporada de verano, al igual que el intendente Guillermo Montenegro, y eso se vio en aumento tras el anuncio del gobierno provincial sobre las prohibiciones a la nocturnidad en el territorio bonaerense.
En este marco, transcendió que ya habría organizadores de la noche porteña que estarían reservando casas importantes para organizar "fiestas clandestinas". "Hay mucha gente de Buenos Aires alquilando casas quintas, casas grandes, para hacer fiestas clandestinas y es vox populi. Independientemente de las medidas de la pandemia, que es un foco infeccioso, las medidas de seguridad de hacer una fiesta en una casa es muy peligroso", confirmó Juan Rodríguez, empresario gastronómico marplatense, en declaraciones a CNN Radio Mar del Plata.
Tras estas denuncias, desde el Concejo Deliberante buscan combatir las "fiestas clandestinas" con la aplicación de costosos castigos para los organizadores y propietarios de locales o domicilios donde se violen las medidas de seguridad sanitarias en el distrito de General Pueyrredon.
Mientras dure la emergencia sanitaria, las fiestas clandestinas podrían ser sancionadas con multas de hasta un millón de pesos en Mar del Plata. Así lo propone un proyecto de ordenanza que presentó este jueves el concejal de la Agrupación Atlántica, Mauricio Loria.
La iniciativa, impulsada por el edil opositor, plantea la modificación de la ordenanza 23353, para que las personas que organicen las mencionadas fiestas, sean sancionadas por un monto que triplica el actual valor de la multa. Se trata de una cláusula transitoria, que estará vigente hasta la finalización de la emergencia sanitaria por la pandemia del Covid-19.
Según el articulado original de la norma actual, por la realización de fiestas en casas privadas o al aire libre, que no cuenten con autorización municipal y que persigan fines de lucro, la ordenanza prevé multas de hasta 300 mil pesos. Es preciso aclarar que la pena que se prevé aplicar ahora de hasta un millón de pesos alcanzaría solidariamente tanto a los organizadores del evento, como a los propietarios del inmueble en el que éste se lleva adelante.
Si se infringe una vez la norma, los organizadores de la "fiesta clandestina" y los dueños de la vivienda podrían ser multados con hasta 2 millones de pesos.
La iniciativa cobra especial relevancia bajo el actual régimen de Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio (ASPO), dispuesto por el gobierno nacional a raíz del incremento de los contagios en el distrito de General Pueyrredon.
En la reciente iniciativa, a la cual El Marplatense tuvo acceso, el concejal Loria manifestó su preocupación por “el momento delicado que el mundo está atravesando debido al coronavirus, que como es sabido, se trata de un nuevo virus que logró diseminarse rápidamente por su alto poder de contagio y para el cual, lamentablemente, a pesar de los esfuerzos de todos los países, aún no hay disponible una vacuna efectiva y accesible”.
Y destacó que “es necesario tomar todas las previsiones posibles para preservar la salud de todos los habitantes y evitar que colapsen los servicios de médicos”.
En declaraciones a CNN Radio Mar del Plata, Loria explicó que “con el ánimo desalentar la realización de fiestas clandestinas que generaban ruidos molestos, inseguridad y disturbios en las zonas aledañas al lugar en el que se desarrollaban en el año 2017 se sancionó la ordenanza 23353 en el gobierno de Carlos Arroyo. Dicha norma establece en su artículo segundo las multas que corresponderían en caso de comprobarse la realización de una fiesta clandestina y en su artículo tercero establece una mayor sanción en caso de reincidencia”.
“Atento a la excepcional situación por la que estamos atravesando y la mayor necesidad de pensar en el bien común, con responsabilidad y compromiso a fin de no poner en riesgo la salud de la población es que proponemos incorporar a la mencionada ordenanza igual sanción que en caso de reincidencia de comprobarse la realización de una fiesta clandestina durante el período en que este vigente el ASPO por la peligrosidad que ello implica”, remarcó el concejal, quien detalló: "Con la nueva normativa, las multas podrían llegar hasta un millón de pesos".
Para finalizar, subrayó que “este bloque considera fundamental establecer que los importes obtenidos por dichas multas se destinen exclusivamente a solventar las necesidades sanitarias por Covid-19 a fin de ayudar a contener la propagación del virus y poder flexibilizar cuanto antes la cuarentena”.
Federico Goransky, empresario gastronómico y de esparcimiento nocturno, explicó a este portal de noticias que "estamos preocupados porque no vemos una posibilidad hoy cierta de apertura. Creo que se puede trabajar al aire libre con burbujas de hasta 10 personas y tener la distancia social necesaria".
"No podemos cerrarle la puerta a eso porque fomentamos la ilegalidad", siguió. "Hoy ya hay fiestas ilegales, lo vemos en Buenos Aires, con videos en redes sociales que hay reuniones en discotecas sin distancia, ni barbijos, ni nada. Creemos que nuestros negocios van a estar más contenidos y controlados", subrayó.
Esta semana, el intendente Guillermo Montenegro le pidió al Jefe de Gabinete de la provincia de Buenos Aires, Carlos Bianco, que "en el marco del Operativo Sol se tenga en cuenta alguna cuestión para controlar las fiestas clandestinas" en el distrito de General Pueyrredon. "Al no haber boliches, esta práctica va a desarrollarse más de lo común, y es necesario realizar controles", afirmó el jefe comunal.
Este lunes, el secretario de Seguridad del municipio, Darío Oroquieta, sostuvo que “durante el fin de semana la Patrulla Municipal constató 106 denuncias por reuniones sociales. Se desarticularon 34 que resultaron positivas, una de ellas con 60 personas”. “Debemos redoblar el esfuerzo y responsabilidad para evitar situaciones que provocan focos de contagios”, remarcó.