Siguen las repercusiones sobre el resonante caso del ataque a tiros sobre dos ómnibus que transportaba a comerciantes marplatenses y regresaban de un tour de compras por la ciudad de Buenos Aires.
Fueron atacados en la Ruta 2. Uno primero, entre la zona de Chascomús y Lezama. No se detuvo y siguió su marcha. El segundo micro fue atacado cerca de la zona donde está el cruce del Río Salado”, señaló el fiscal de Chascomús que interviene en la investigación, Jonatan Robert.
En declaraciones al canal TN, precisó: “La camioneta en ningún momento buscó detener a los micros. Es decir, tenemos la agresión y tenemos muchos testimonios, porque en cada uno iban 22 personas más chofer y acompañante. Por el momento no tenemos establecido que la camioneta haya intentado detener al ómnibus”.
Ambos micros, con pasajeros en su interior, pertenecían a la empresa Micro Sur y circulaban con sentido Mar del Plata, desde la Ciudad de Buenos Aires. Según trascendió, los disparos fueron realizados desde una camioneta Toyota Hilux color blanca. Los pasajeros volvían de realizar un “tour de compras” en el barrio porteño de Flores.
Tomó intervención en el caso la Departamental Castelli Dpto. Seguridad Vial IV de la Policía de la Provincia de Bs As con intervención de la UFI en turno. Se contabilizaron más de 90 impactos de bala en las unidades, según precisaron fuentes policiales.
“No puedo descartar ninguna hipótesis. Ni la de robo, ni la de amenazas e intimidación. Hasta que no pueda tener más determinado el motivo de esta conducta, no me quiero aventurar”, precisó el fiscal Robert.
En este sentido, aclaró: “El dato que tenemos en común es que es un mismo rodado el que habría realizado los tiros”. Respecto a la cantidad de disparos, Robert no quiso precisar un número total debido a que todavía se realizan pericias en el lugar. “Una de las unidades tuvo que detener la marcha por haber perdido el aceite del motor a causa de un impacto”, comentó.
Cecilia, en tanto, agregó en su relato: “Se detuvo el micro porque el motor explotó cuando le dieron. El otro micro que iba adelante de nosotros pudo seguir hasta la delegación de Castelli. Una camioneta blanca fue la que nos venía siguiendo desde Chascomús. Primero se nos cruzó al micro de adelante, después le tiroteó atrás al que lleva el número 17 pero no se dieron cuenta que los habían tiroteado”
“Por lo que nos dijeron los policías —continuó la mujer—, usaron una pistola automática pero de bajo calibre por la cantidad de tiros. Pero no llegó a perforar ningún vidrio gracias a Dios, porque imaginate que si no, nos moríamos todos. Si no fuera por los choferes, nos moríamos”.
Por último, aclaró: “La intención no fue ni robarnos, ni hacernos parar. La intención fue que el micro se detenga y le pase lo que le pasó a la empresa en la que nosotros viajamos. Acá hay una interna muy grande. La compañía por al que viajé la maneja una mujer y la verdad es que lo hace muy bien y eso está molestando”.