Antes que lo echaran, Mourelle renovó un plazo fijo de $ 300 millones
Por Carlos Walker
Antes de que el intendente Carlos Arroyo tomara la decisión de echarlo del gabinete municipal, el ahora exsecretario de Hacienda, Hernán Mourelle, firmó el decreto nº 2205 por el cual la comuna de General Pueyrredon renovó por 30 días un plazo fijo de 300 millones de pesos en el Banco Nación Argentina.
En el documento, al cual El Marplatense tuvo acceso, el exfuncionario consideró adecuado “efectuar una inversión financiara” en el marco del actual contexto macroeconómico. “Resulta prioritario llevar acciones temporarias que permitan mantener actualizado el valor de estos saldos a fin de no perjudicar las finanzas del municipio”, explicó Mourelle.
No fue la primera vez que el exsecretario de Hacienda recurrió a la herramienta del plazo. Lo realizó durante los últimos meses. Decisiones que cosecharon las críticas de la oposición y del propio oficialismo.
En enero de este año, la concejal de la Coalición Cívica, Angélica González presentó un pedido de informes con el objetivo de que el Ejecutivo brinde un detalle de los plazos fijos constituidos por el municipio.
La edil de Lilita Carrió pidió que se informen los bancos en los que fueron confeccionados, así como los montos, vencimientos e intereses. También reclamó explicaciones sobre con qué partidas o previsiones presupuestarios se relacionan los montos destinados a esos plazos fijos, y si provienen de un eventual diferimiento de pago de deudas a proveedores o acreedores del municipio.
En aquel momento González consideró que se trataba de un hecho de “suma gravedad dada la situación general que atraviesa el municipio”. En ese marco, denunció que “la ciudad sufre la falta de inversión municipal, ya sea en infraestructura, obras, servicios, controles y mantenimiento de los espacios públicos”.
Según la edil, “basta recorrer los distintos entes descentralizados o las calles en cada uno de los barrios para ver el estado general de la ciudad, su falta de mantenimiento y la falta de inversiones necesarias para mejorar la calidad de vida de vecinos y contribuyentes”.
Y recalcó “las deudas que tiene el municipio con diferentes proveedores, los cuales se fueron incrementando con el correr de los años hasta llegar a la situación actual”.
Para finalizar, González aseveró que “resulta a todas luces sorprendente que los fondos necesarios para distintos requerimientos de la ciudad y la ciudadanía no sean ejecutados y se encuentren paralizados en una operación financiera solo destinada a generar intereses”.