El Banco Central volvió a vender dólares para controlar la suba
Las palabras de Mauricio Macri, que antes de que abrieran los mercados anunció que el Gobierno acordó con el FMI adelantar los desembolsos para asegurar el financiamiento de 2019, no alcanzaron para aplacar a los mercados. En los bancos, el dólar subía 11 centavos, a $ 32,16 en promedio. El martes había cerrado en $ 32,05.
Para contener a la divisa, el Banco Central realizó una nueva subasta de US$ 300 millones y vendió todos, con un mínimo de $ 31,60. El uso de reservas para limitar la volatilidad de la divisa es una de las preocupaciones de los economistas, que esperan que el ministro Nicolás Dujovne dé detalles de cuántos fondos anticipará el FMI.
El dólar mayorista había arrancado el día con una suba pico de 20 centavos para luego acomodarse casi igual que el martes y volver a subir. Avanzaba 16 centavos, a $ 31,63. En Brasil, el dólar también empezó en alza, para luego estabilizarse a los mismos valores que el día anterior, según consignó Clarín.
El martes, en otra jornada complicada, el dólar llegó a un récord de $ 32,14 antes de terminar cerrando en $ 32,05. Y esto a pesar de que el Banco Central usó en dos días US$ 410 millones de las reservas para contener la suba. A cambio, absorbió cerca de 13.000 millones de pesos.
La demanda de divisas viene por varios lados: los pesos de quienes venden Lebacs en el mercado secundario; la liquidez de empresas (algunos importadores, desde ya) y grandes inversores y, en menor medida, de quienes aprovechan la facilidad del home banking para transformar sus pesos en dólares, dejando las divisas depositadas dentro de los bancos.
La suba del dólar refleja, además, la incertidumbre que empezó a generarse en las últimas semanas acerca de la capacidad del Gobierno para hacer frente a los gastos de 2019, tanto por el pago de la deuda como por el déficit fiscal. Los economistas reclamaban que el equipo económico pusiera sobre la mesa los números y admitiera cuál era el bache a cubrir en el complicado año de las elecciones. El anuncio de Macri apunta en ese sentido, pero se ve que el Gobierno no termina de leer bien qué es lo que necesita el mercado para volver a la calma de julio.