Paul McCartney eligió sus temas preferidos de The Beatles y sorprendió con un “lado B”
La eterna e infinitamente interpretada Yesterday, el sutil encanto de A Long and Winding Road, en su versión orquestada or Phil Spector y en la que Paul McCartney reivindicó en el álbum Let It Be... Naked; la misma Let It Be o el pedido de ayuda desgarrado de Help!. Definitivamente, el repertorio de The Beatles es tan pródigo en grandes canciones que toda comparación está destinada al fracaso.
Pero, ¿cuál de todas ellas es la favorita de Paul McCartney, a esta altura, junto con Ringo Starr, los representantes de ese aluvión musical que cambió para siempre el paisaje del arte popular en Inglaterra y más allá, dejando una marca que el tiempo no hace sino resaltar a través su vigencia?
"Siempre digo You Know My Name, Look Up The Number. Es como un insignificante lado B medio loco, que nadie conoce, pero que para nosotros fue muy gracioso hacer. Recuerdo cuánto nos divertimos . Pero hay muchas canciones que me encantan de los Beatles. Creo que Strawberry Fields es una gran canción, creo que Hey Jude funcionó de manera genial. Tengo un montón de canciones favoritas: Blackbird me encanta. Eleanor Rigby también" enumeró el músico, en una entrevista hecha por Zane Lowe para Apple Music 1.
Pero el beatle no se quedó tan sólo en la selección de su Top 5 de la banda que integró, sino que le dedicó un párrafo aparte a Let It Be, a la que señaló como la que naturalmente decidiría escuchar por el resto de su vida, si se tratara de elegir sólo una.
"Es la más ubicua. De alguna manera llegó a todas partes. Omnipresente desde el latín, ubi quo, que significa en todas partes", resaltó McCartney, que acaba de lanzar McCartney III, un nuevo álbum que suma a su discografía solista, en este caso con todos los instrumentos grabados por él mismo, en sintonía con McCartney (1970) y McCartney II (1980), ambos creados bajo el mismo concepto.
Para completar el cuadro, Macca contó -una vez más- cómo era darle forma a esas canciones imbatibles junto a John Lennon. "Siempre creaba por mi cuenta, a menos que estuviera con John. Pero incluso entonces yo creaba algo por mi cuenta, él por la suya y luego nos juntábamos. Casi nunca nos sentábamos y no teníamos nada. Siempre había algún tipo de idea. Y venía de algo personal", explicó el beatle.
"La gente pregunta 'cuándo escribís', y esas cosas... Y yo respondo: 'Cuando tengo tiempo. Cuando no hay nada que hacer hoy o esta tarde, y estoy de humor'. Así que agarraré una guitarra y pensaré: 'Tengo tiempo. Podría escribir una canción'", redondeó.
A partir de esa explicación en torno a cómo cada uno armaba los cimientos de sus propias canciones, McCartney contó que se daba "la cosa donde yo diría una frase y él sugeriría la siguiente. Y luego yo sugeriría la siguiente".
"Así que nos hacíamos ping pong el uno al otro. Y a menudo teníamos muy buenos resultados, porque John era una personalidad muy diferente. Así que tenías esa gran cosa de A y B. Era sólo un viaje de descubrimiento. ¿Sabés a lo que me refiero? Suena cursi, pero lo es y eso es lo que me encantaba de él. Nunca se sabía lo que iba a salir. Ni idea de si esto iba a ser una canción cálida, una canción triste, una canción de historia. Nunca se podía decir", concluyó.
Fuente: Clarín