Periodista de EE.UU. reveló inconsistencias de los marplatenses
Luego de que el viernes el fiscal federal Juan Manuel Pettigiani aportara nuevos detalles a este medio de la investigación que involucra a dos empresarios marplatenses asociados a Daniel Muñoz, ex secretario de los Kirchner, El Marplatense se contactó con los periodistas estadounidenses que lograron establecer mayores pruebas en contra de los presuntos testaferros del emblemático ex funcionario presidencial, fallecido en abril de 2015.
Se trata de Kyra Gurney y Nicholas Nehamas, dos investigadores del Miami Herald, que pudieron comprobar 25 millones de dólares en propiedades a nombre de empresas offshore, cuyos registros aparecían Sergio Todisco y María Ortíz Municoy, una ex pareja oriunda de la ciudad de reconocida trayectoria por el rubro textil e inmobiliario, ambos marcados en la mega investigación de los Panamá Papers en 2016.
Los marplatenses son investigados por la AFIP y la Unidad de Información Financiera (UIF) a raíz de no poder justificar bienes inmuebles por 65 millones de dólares. Se presume que facilitaron maniobras de lavado de dinero correspondiente por la obra pública, a través de la gestión de Muñoz, uno de los principales mencionados en los Cuadernos del chofer Oscar Centeno.
“Todo empezó por los archivos de los Panamá Papers. En esos archivos salió Daniel Muñoz, quien supimos que tenía vínculos muy cercanos con los Kirchner y después estuvimos mirando dueños de unas unidades de lujo en algunos edificios y condominios en el sur de la Florida”, contó a este medio Gurney, quien accedió el fin de semana a la entrevista.
Consultada sobre el origen de su investigación, respondió: “Cuando miramos quienes habían registrado esas empresas, aparecieron los nombres de Sergio Todisco y María Elizabeth Municoy”. “Cuando empezamos a investigar un poco, vimos que en Argentina un sitio de investigación, Border Periodismo, ya había dado cuenta que había como 40 millones de dólares de propiedades vinculadas con empresas de esa pareja. Cuando empezamos a mirar más, encontramos 25 millones más de propiedades, condominios y centros comerciales”, agregó, acto seguido.
“Nos sorprendió mucho porque cuando comenzamos a investigar un poco más, vimos que el señor Sergio Todisco, al mismo tiempo que registraba esas propiedades, trabajaba como director de una empresa offshore en Islas Vírgenes Británicas, cuyo dueño de esa empresa era Daniel Muñoz y su esposa. Ahí nos sorprendió el vínculo”, detalló la periodista.
En tanto, brindó precisiones sobre el contacto personal que mantuvieron con el fiscal federal de Mar del Plata, Juan Manuel Pettigiani, a cargo del caso: “Hablamos con el fiscal Pettigiani. Nos dijo que, según los registros, el señor Todisco tenía ingresos por 2 mil dólares por mes, más o menos. Pues alguien con esos recursos, obviamente, es un poco difícil explicar porque tendría como 65 millones de dólares en inmuebles en la Florida”.
En tanto, detalló que, en su momento, esos bienes, a excepción de dos, “fueron comprados sin hipotecas, es decir en efectivo”.
“Cuando estuvimos investigando eso, por causalidad, el señor Pettigiani estaba de vacaciones en Miami. Con mi compañero Nicholas Nehamas, quien también investigó esto, nos reunimos y el fiscal nos comentó de que se trataba su investigación y nos indicó los ingresos de Todisco, que eran bajos para tener tantas propiedades de lujo”, completó.
Además, la investigadora narró que no pudieron hablar con Todisco, aunque sí con Municoy. Sobre ese diálogo, afirmó que ella mintió en sus dichos, al intentar desprenderse de dichos negocios: “Con el señor Todisco nunca pudimos ponernos en contacto, nunca pudimos averiguar dónde estaba viviendo. Con la señora Municoy si logramos hablar con ella por teléfono. Ella tenía una inmobiliaria en el sur de la Florida y ella nos dijo que no sabía nada de la mayoría de esas propiedades. Dijo que, de pronto, su esposo había puesto su nombre ahí porque estaban casados y que ahora ya no lo están”.
“Después, a raíz de una demanda, nos dimos cuenta que la señora Municoy no nos había dicho la verdad. A raíz de otra demanda relacionada con la venta de una de las propiedades más tarde, salió a la luz que estaba involucrada en algunas de esas propiedades”, explicó.
Frente a las maniobras que iban descubriendo, Gurney destacó que “a menudo” comenzaron a detectar registros bajo esa modalidad: “Una de las cosas que nos dimos cuenta a raíz de los archivos de los Panamá Papers, es que para la gente muy rica es bastante común tener estas empresas offshore y comprar propiedades de lujo en nombre de una empresa. Hay razones totalmente ilegítimas por hacer eso. Si bien hay personas que quieren conservar su privacidad, también hay gente que quiere esconder dinero sucio”.
Por otra parte, contó que el ex matrimonio afín al Gobierno kirchnerista vendió los onerosos inmuebles. “Una cosa que nos resultó interesante es que las propiedades vendidas no se concretaron por mucho dinero”, comentó, al hacer alusión a que se vendían las propiedades “al mismo valor o menor”.
“Cuando hablamos con el fiscal nos comentó que estaba muy preocupado porque decía que iban a venderse todas esas propiedades e iba ser muy difícil encontrar a quienes eran los dueños", recordó, sobre esta situación.
Señaló que, a raíz de estos hechos, “los fiscales de Miami están muy interesados en casos de corrupción”, aunque reparó en qué aún “se necesita mucha evidencia” para poder probar los ilícitos. “Los fiscales se están abocando a analizar propiedades de lujo en Miami, Nueva York y en otras ciudades, donde se compra sin hipoteca”, añadió.
“Vemos muchas compras que parece que surgieron por dinero de la corrupción, es un problema bastante grave aquí”, afirmó la periodista.
En diálogo con este portal, Pettigiani había dicho que la información que se había recolectado años atrás sostenía que el ex secretario de los Kirchner y los marplatenses “habían actuado juntos al comienzo”.
Con el amplio movimiento Judicial que generó el hallazgo de los cuadernos de Oscar Centeno, el ex chofer de la mano de derecha del ministro kirchnerista De Vido, Ricardo Baratta, Pettigiani se mostró expectante de que se pueda avanzar sobre las presentaciones que se impulsaron años atrás, ya que en su momento los elementos probatorios aportados no permitieron dar lugar a la hipótesis delictiva.
“Nos produjo un gran dolor de que esa información que fue aportada por periodistas extranjeros no hubiera tenido florecimiento en algún tipo de responsabilidad penal, y hoy creo que ya es muy difícil no establecer la conexión entre los bolsos que menciona Centeno y estos inmuebles”, consideró, y ratificó: “Ninguno de los protagonistas de esta historia podía justificar la adquisición de estos bienes con su patrimonio exclusivamente”.
“La lucha contra la corrupción es una bandeara que planteamos hace muchos años y por eso se pudo acceder a esta información, porque hay gente que sigue confiando en las tareas de la Justicia”, sentenció Pettigiani.
LAS MANIOBRAS
Muñoz fue secretario de Néstor y luego dos años de Cristina. En los cuadernos, el 11 de agosto del 2010, Centeno escribió, por ejemplo, “al término de los 20′ subieron el Lic Baratta y Daniel Muñoz, el Lic. vino a mi auto y retiró los bolsos y se los entregó a Daniel Muñoz, quien los subió a una camioneta; luego el Lic Baratta tuvo una reunión con el Dr. Néstor Kirchner y luego lo llevé a su depto”.
Muñoz directamente o a través de terceros había creado 13 empresas en Miami y en el estado de Delaware, que funciona como un paraíso fiscal dentro de EE.UU y también fue usado por Lázaro Báez. El total de inversiones hechas a través de unos amigos marplatenses llega a unos 65 millones de dólares. Por esta razón, la UIF quiere ahora desde su rol de querellante pedir el embargo de las cuentas de estas offshore y empresas norteamericanas vinculadas a Muñoz para tratar de recuperar parte del dinero robado al Estado.
En un exhorto enviado a EE.UU., el juez federal Luis Rodriguez pidió a la justicia de ese país todos los datos de 13 empresas constituidas en Miami y Delaware por los socios marplatenses de Daniel Muñoz, Sergio Todisco y María Ortiz Municoy.
En noviembre del 2016 con la intención de embargar esos bienes preventivamente, el magistrado envió un exhorto a EE.UU. y a otro las islas Vírgenes Británicas para que confirme si Muñoz, tenía inmuebles y cuentas bancarias ocultas por unos 65 millones de dólares. A pedido del fiscal Stornelli, Rodríguez envió esos pedidos de cooperación para tratar de confirmar la enorme estructura financiera negra que Muñoz había creado en el exterior y que no podía justificar con sus ingresos como funcionario. También realizó una serie de allanamientos y pidió documentación de todos los investigados a la AFIP, entre otras medidas de prueba.