“Si no hay alguien que haga cumplir las leyes, esto es un viva la pepa”
Este lunes se llevó a cabo en el Concejo Deliberante una jornada por la conmemoración del Día Mundial de la Seguridad Vial, en la que estuvieron presente familiares de víctimas como Verónica Borelli (madre de Lucía Bernaola) y también el fiscal Rodolfo Moure, quien dialogó con El Marplatense y destacó la importancia de esta reunión al manifestar que “es muy importante que hablemos de siniestralidad vial, porque significa que hay interés de los diferentes sectores de la población para trabajar en esto y tratar de reducirla. Han surgido ideas interesantes que serán transmitidas a aquellos que tienen poder de decisión”.
En referencia a una posible y práctica solución, Moure le apuntó a la policía: “para comenzar a solucionar esta problemática debe haber concientización y hacerle ver a la gente que las leyes están y se cumplen. Trabajamos en ello, desde el poder legislativo, pero si no hay alguien que haga cumplir las leyes, esto es un viva la pepa, que es lo que está pasando hoy en día. Debe ser la policía quien las haga cumplir”, sostuvo y amplió: “ya desde hace un mes hemos mantenido reuniones con la policía, tanto nacional como provincial para pedir su urgente intervención con un rol activo en el control del tránsito. Lamentablemente se sigue tratando el tema como una cuestión menor y que es delegable exclusivamente a las municipalidades, y los demás miran para otro lado. Desde la fiscalía pedimos que sea atacado como si se tratara de un delito de acción publica y la policía debe intervenir”.
“Es una burla a mi hija muerta”
Por su parte, Verónica Borelli, también presente en la jornada de este lunes, expresó que “estoy enojada con la vida porque me sacaron mi vida, que es un hijo. La verdad que para llegar a algo tenemos que estar todos unidos. En este día tan importante, en esta reunión éramos 6 mamás y papás de víctimas, con 5 o 6 concejales. Acá está el desinterés que nos brinda el Estado, el desinterés de una muerte, pero nosotros vamos a seguir peleando desde el lugar más doloroso que hay, que es la pérdida en este caso de mi hija Lucía”.
Sobre la resolución de la justicia en el caso de su hija, subrayó que “nosotros apelamos prácticamente a los diez días de haber finalizado el juicio tan ridículo para Lucía. La realidad es que acá había un solo culpable que es Federico Sasso, quien fue condenado a 6 años de máxima. Nunca voy a estar conforme. Me parece que no poner como agravante un test de alcoholemia es una burla hacia mi hija muerta. Donar el auto de Federico Sasso a sus padres es una burla a mi hija muerta. Todo esto lo dictó un Tribunal, por lo tanto, tengo mucha fe que Casación va a rever la sentencia de este tribunal y va a haber novedades positivas para Lucía”.