Instituto de Menores: la Justicia denuncia que no hay psiquiatras
Lo señaló el fiscal Marcelo Yañez Urrutia, quien insistió en los cuestionamientos por la falta de herramientas de contención que hay en el centro para adolescentes en conflicto con la ley penal. "Siempre estamos incompletos", aseveró.
Los cuestionamientos por la falta de herramientas de contención que dispone el Centro Cerrado de Batán para dar alojo a adolescentes en conflicto con la ley penal aparecen de manera constante y recurrente por parte de la Justicia. Referentes del Fuero de Menores denunciaron que el instituto no cuenta con psiquiatrias ni psicológicos, que permitan cumplir con los tratamientos que se requieren para cada caso.
"Este instituto tendría que tener todas las herramientas a disposición y en el mismo lugar para hacer efectivos los tratamientos y evitar futuras fugas o evasiones pero hoy no funciona nada de eso", aseveró a El Marplatense el agente del Fuero de Responsabilidad Penal Juvenil, Marcelo Yañez Urrutia.
El fiscal recordó el intento de homicidio que protagonizó días atrás un adolescente, de 16 años, que le dio tres puñaladas a su cuñado tras una discusión, y advirtió que esa persona se ve atravesada por un "problema pisquiátrico".
Según indicó el funcionario judicial, para poder cumplimentar con el tratamiento específico que requieren estos casos, se debe trasladar al imputado al Hospital Interzonal General de Agudos (HIGA) para que los profesionales médicos lo "vean y mediquen".
"Sacar un joven del instituto genera peligrosidad por la posibilidad de una fuga, un gasto de dinero porque hay que poner un móvil especial y personal para eso, y toda una serie de cuestiones que si se trabajaran dentro del instituto se podrían evitar", cuestionó Yañez Urrutia.
El fiscal consideró que este faltante de profesionales en especialidades específicas son un reflejo de los "problemas de siempre" que han atravesado al centro que se encuentra en el distrito. "Siempre estamos medios incompletos con el Instituto", afirmó.
En materia de seguridad, el agente del Fuero de Menores también cuestionó que no haya cámaras que den custodia ocular a los pabellones, después del último caso de gravedad, en el que un joven prendió fuego una unidad.
"En los pabellones no hay cámaras de seguridad tampoco, y no podemos poder determinar si hubo un agente externo que haya incidido en la acción para que el joven prendiera fuego la celda", advirtió.