Batán: "Con más hacinamiento, hay más violencia y más promiscuidad"
Con el paso de los meses, las miradas de la Justicia con respecto al contexto que se gesta dentro de la cárcel Batán no logra mutar con diagnósticos positivos: mayor población carcelaria, mayor hacinamiento y mayor violencia, son los síntomas de una problemática que mantiene una alarma encendida que aún no encuentra respuestas.
El Juez de la Cámara de Apelaciones y Garantías en lo Penal de Mar del Plata, Esteban Viñas, reconoció que, a la fecha, hay "problemas muy serios" y "defectos muy graves" en el funcionamiento del sistema carcelario que tiene lugar en la Provincia y la ciudad. "La población carcelaria está creciendo de manera exponencial y va a superar este año los 42 mil internos. La Provincia solo tiene capacidad cerca de 26 mil internos", advirtió el magistrado, en diálogo con El Marplatense.
El funcionario judicial insistió que cuando hay mayores contextos de hacinamiento, se traducen en "más violencia y más promiscuidad", lo que "imposibilita" la realización de tratamientos con las personas que están privadas de su liberta. "Necesitamos inversiones importantes para procurar que la cárcel no sea una institución que fomente la criminalidad y el resentimiento", apuntó.
Viñas cuestionó las políticas implementadas por los últimos Gobiernos para intentar revertir la problemática y reconoció que "la reinserción no rinde en la ganancia política". "En los últimos 30 años, los distintos funcionarios de los Ministerio de Justicia lo único que plantean es cambiar el Código Penal, mejorar las penas y restringir más las salidas", criticó.
En este marco, el juez atribuyó el crecimiento sostenido de la población carcelaria a un deterioro de la situación social. "La mayoría de la población carcelaria es población de situación social muy baja. Esto es un dato de la realidad", aclaró, y señaló: "Yo no digo que haya que liberar a todo el mundo pero hay que dar un marco de razonabilidad y racionalidad. Si tenemos una capacidad de alojamiento limitada, hay que pensar otras alternativas".
El magistrado local recordó que la unidad penal de Batán había sido pensada inicialmente en su creación como un "verdadero centro de capacitación y de trabajo". "Desde la cárcel se podría hacer asfalto, se podrían arreglar escuelas, se podrían hacer alimentos para comedores escolares y barriales, y ahí la comunidad podría darse cuenta de la importancia que esto tiene", dijo, e insistió: "Un centro carcelario pensado como un verdadero centro de capacitación y trabajo podría brindar un montón de ayuda".
El juez de Garantías, Juan Tapia, había realizado un relevamiento a fines de año en la cárcel de Batán, en el que advirtió, en sólo un año, un incremento de la población del 40 por ciento: según le reveló a este medio, la unidad tiene 1269 internos, cuando su capacidad máxima estipulada es de 900 personas.
Esta semana, hubo otra víctima fatal más en la unidad penal N°15, después de una reyerta que tuvo lugar en la zona de visitas. El interno fallecido, de 27 años, recibió un puñalada que terminó con su vida en el Hospital Interzonal General de Agudos (HIGA).