El conflicto en el barrio Las Heras pareciera que llega a su fin pero está lejos de eso. Este viernes las personas que tomaron el terreno se reunieron en una audiencia de mediación para solucionar la toma pero el desenlace fue determinante. Los vecinos deben irse del terreno.
En un terreno ubicado en Fortunato de la Plaza entre Vignolo y Olazar se instalaron al menos 60 familias en busca de un lugar donde vivir pero se llevaron la sorpresa de que las tierras tenían dueños.
En ese contexto, la situación fue rápidamente judicializada y se generó una orden de desalojo en primera instancia voluntaria por parte de las personas que tomaron el sector y el momento final en donde ocurrirá el desalojo con las autoridades necesarias, será el miércoles próximo.
"Nos retiramos de la audiencia porque nos dijeron que la orden ya está hecha. Nos tenemos que ir. Les pedimos un plazo de unos días para quedarnos pero no. Dijeron que los dueños no quieren y que hay que hacerle caso a la orden de desalojo", dijo Camila Chávez, referente de la toma.
"Tenemos que ver cuando es el desalojo. Puede ser mañana, el domingo, el lunes, en cualquier momento. Pero nosotros vamos a estar ahí, no nos vamos a retirar. Por más que nos venga a sacar la policía, no nos vamos a ir", continuó Chávez, en diálogo con El Marplatense.
"Nos van a sacar pero vamos a volver. Ahora somos 25 personas ahí ubicadas y somos quienes realmente necesitamos un lugar para vivir. Hoy vinimos solo los referentes pero somos muchos más", expresó una de las personas es parte de la toma.
En cuanto al pedido de una solución por parte de quienes tomaron los terrenos, Chávez concluyó: "No no dieron ninguna alternativa porque dicen que mientras tengamos tomada la zona, no nos van a brindar apoyo en nada. No nos ofrecen ningún pedazo de tierra, nada".
Sobre esto y las constantes tomas de tierras que sufre el barrio de Las Heras, el intendente de General Pueyrredon, Guillermo Montenegro explicó: "Yo no negocio con delincuentes, ni voy a aceptar ningún tipo de extorsión. Voy a estar siempre del lado de los marplatenses, de los que laburan, de los que se esfuerzan, de los que se levantan temprano, de los que me cuentan que tardaron 30 años en construir su casa, ladrillo por ladrillo".