Rigel: a 5 meses, las familias insisten con el rescate de los cuerpos
A cinco meses del hundimiento del pesquero marplatense Rigel, el pedido de rescate de los cuerpos de los tripulantes que desaparecieron, mientras navegaban en aguas patagónicas el 9 de junio pasado, sigue sin respuestas de la Justicia y del Estado.
La movilización que se gestó esta tarde desde la Base Naval hasta la Banquina Chica del Puerto -como cada día 9- fue esta vez bajo la consigna "Que bajen los buzos", "Los trabajadores desaparecidos de los buques existen y nadie los busca" y "153 días sin ellos, 153 días sin respuestas".
"Después de 5 meses del hundimiento, el Gobierno no accede a disponer de los fondos necesarios para el rescate de los cuerpos de los tripulantes. A su vez, también se exige una política de Control Estatal de las embarcaciones, que garantice el fin de los hundimientos", aseguraron las familias mediante un comunicado en el que invitaron a toda la comunidad marplatense a apoyar esta causa. Por la tarde, habrá una misa en la Catedral de los Santos Pedro y Cecilia a las 19 y, a continuación, un acto en la peatonal San Martín.
“Hasta ahora no hubo ninguna respuesta ni de la Municipalidad ni de la Provincia ni de la Nación. No hemos tenido ninguna ayuda. Nos movemos nosotros por lo nuestro nomás. Se nos prometió ayuda social, psicológica y económica y hasta ahora no vimos nada”, aseguró días atrás a El Marplatense Miguel Osorio, padre de uno de los tripulantes.
El buque Rigel zarpó el 5 de junio pasado del Puerto local rumbo al sur para abocarse a la pesca de langostinos y el último contacto que tuvo con las autoridades fue alrededor de las 23 del viernes 8 de junio. Iba a la búsqueda del langostino que por esa época abunda en las costas de Chubut y cuyo valor de venta es mayor al de cualquier otro marisco.
El sábado 9 de junio fue hallado un cuerpo en la zona donde se buscaba al pesquero y finalmente se confirmó que era el de Salvador Taliercio, capitán de la embarcación. Pero el pesquero tenía otros 8 tripulantes a bordo: el segundo patrón Rodrigo Sanita, el jefe de máquinas Néstor Rodríguez, el auxiliar de máquinas Cristian Osorio y los marineros Amadeo Jonatan, Nahuel Navarrete, Carlos Daniel Rodríguez, Pedro Mierez y Rodrigo Blanco.
Después de 26 días de una angustiosa búsqueda, la Prefectura Naval Argentina logró hallar el casco de la embarcación, que permanecía a 93 metros de profundidad y 44° de latitud sur y 062° longitud oeste.